martes, 27 de marzo de 2018

Sonata de Mekania, de Fco. V. Salvador

El imperio de Braer, agresivamente expansionista, teocrático y monoteista, está a punto de iniciar una nueva campaña de conquista siguiendo los designios del emperador patriarca, gobernante y cabeza de la iglesia de Antim. Su objetivo se encuentra entre las ciudades libres, y se focaliza en Mekania, la villa de los ingenios.

El imperio no anda falto de enemigos, y muchos de estos se unirán a la causa de la Mekania para ayudar en su defensa cuando llegue el momento de combatir a las legiones imperiales. 

Sonata de Mekania es la segunda novela del autor ambientada en Lüreon, el mundo de fantasía desarrollado a lo largo de años escribiendo relatos y organizando campañas roleras. 

El libro anterior, Lander, legado de reyes, contaba el devenir de este reino a lo largo de varios siglos, desde su fundación hasta su conquista a manos del imperio braerio. Lo hacía de forma episódica, dedicando un capítulo a cada uno de los monarcas de la dinastía gobernante, lo que le otorgaba una estructura sencilla. Sonata de Mekania resulta una obra mucho más ambiciosa, por extensión y por su formato. Y a mi parecer, una que demuestra los progresos del autor.

Y es que se trata de una novela coral, con multitud de personajes poblando sus páginas, provenientes de todos los estamentos sociales, con orígenes muy diversos y situados en ambos bandos de la guerra. No todos ellos van a recibir la misma importancia en la historia, hay unos cuantos principales, pero ninguno que mantenga el protagonismo absoluto ni que acapare la atención. El jefe mercenario, último heredero de la estirpe de reyes de Lander; el filósofo de origen braerio, ahora ciudadano del mundo, que busca una mediación diplomática entre las partes en conflicto; el duque de los urganos, pueblo nómada que acude a la guerra supuestamente en apoyo de Braer, aunque sus verdaderas lealtades son únicamente para sí mismos; el legionario braerio a quien las circunstancias ponen bruscamente al frente de una legión, poniendo a prueba su capacidad para salvar la vida de sus compañeros; y muchos, muchos más.

 Algunos tienen menciones muy breves, salteadas aquí y allá, dejando claro que la gente que lucha y muere en la guerra no son sólo números, sino individuos con sus propios sueños. Que la guerra haya sido iniciada por los ambiciosos e intolerantes gobernantes de Braer no convierte a los habitantes del imperio en villanos de cartón piedra, ni la defensa de Mekania implica que quienes combatan en este bando sean campeones de la libertad.

La historia tiene una gran complejidad por las implicaciones del conflicto que se van observando a medida que este se desarrolla, con multitud de implicados y acontecimientos, saltando de uno a otro cada pocas páginas. Sin embargo, el autor ha tenido el buen oficio de hacer comprensible la historia, que se sigue sin problemas. 

Y dado su argumento, el aspecto bélico tiene mucho peso en el libro. Hay unas cuantas batallas, todas ellas descritas a nivel del suelo, por la gente que está en medio de semejante situación. En general, sin muchos momentos para el heroismo entendido en plan guerreros que acaban con docenas de enemigos sin dificultad. Es todo mucho más pedestre.

Sonata de Mekania puede leerse como una novela independiente y autoconclusiva, aunque se complementa con Lander, legado de reyes -al menos con la parte final- y con algún otro relato anterior. Pero eso sí, se deja claro que se trata de un capítulo en la larga saga emprendida por el autor, una etapa de una historia cuyas ramificaciones y consecuencias serán exploradas en nuevas entregas literarias. Y supongo que también roleras, gracias a un grupo de jugadores con los que lleva años y años enriqueciendo su ambientación de Lüreon en detalles.

La verdad es que he leído muchas novelas de este género, aceptadas y distribuidas por editoriales, que son muy inferiores en calidad a Sonata de Mekania, que ha sido autopublicada en formato digital (disponible en sitios como Lektu). Por mi parte, me quedo a la espera de ver qué es lo siguiente que ofrecerá su autor. Sea lo que sea, resulta prometedor.

2 comentarios:

  1. Ya lo dije esta mañana cuando compartí por G+, pero lo vuelvo a escribir: ¡gracias!
    Estas cosas son muy importantes para los autopublicados.

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    1. No se merecen, que la opinión es sincera. Y a ver cómo continúa la historia...

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